En cada época de la historia se produce una patología psicológica determinada por nuestro estilo de vida.
Los principales males psicológicos que hoy nos afectan son la ansiedad en primer lugar seguida de la depresión. Son males totalmente diferentes que no siempre van de la mano, pues ambos tienen entidad propia, aunque en ocasiones puedan darse conjuntamente.
Tres de cada cuatro personas que visitan al psicólogo o al psiquiatra lo hacen por problemas de ansiedad. Se estima que el 14% de la población la sufrirá en algún momento de su vida, aunque no siempre la identifiquemos, a pesar de alterar seriamente nuestra vida diaria.
El 57% de la población, según la encuesta europea de salud del año 2014, admite haber tenido problemas de ansiedad alguna vez en su vida, mientras que el 34% afirma haber padecido depresión, y estos números no hacen más que subir.
Casi la mitad de las visitas a los centros de atención primaria (49%) se producen por trastornos asociados a la ansiedad y el estrés.
La relevancia de estas problemáticas es tan notable que, desde el ICAP, hemos decidido dotarlos del protagonismo que tienen a nivel casuistico concediendole un apartado propio en nuestra web.
Para recuperarse de estas patologías hay que aprender a reconocerlas, explorar sus consecuencias y las limitaciones que imponen a nuestras vidas, admitir como nos hacen sentir, conocerse y valorarse a uno mismo para finalmente afrontar y vencer a la enfermedad.
Como consejo, desde el ICAP, tanto para estos casos como para cualquier otro, sean de la naturaleza que sean, independientemente de la edad o el sexo que se tenga ante un problema de salud, cuanto antes se pongan en tratamiento mejor pronostico y mayores posibilidades de éxito se tendrá.
Es por ello que desde ICAP nos comprometemos a hacer un exhaustivo y personalizado tratamiento ante la multitud de problemáticas que se originan en cualquier fase de la vida debido a problemas adaptativos, afectivos o emocionales que se puedan estar generando entre nuestros pacientes. Tal es así, que el compromiso de ICAP para esta población entre otras muchas cualidades, es el de tan sólo aceptar cuatro casos diarios y no aceptar un quinto a no ser que uno de los cuatro anteriores esté en fase de supervisión o en vísperas de un alta terapéutica para garantizar la exclusividad y la inversión de tiempo apropiada a cada caso.